viernes, 1 de enero de 2016

Un año nuevo, cero propósitos

De nuevo el año se ha diluido en sorbos de champagne. Este año ha sido especialmente duro para mucha gente a pesar de que prometía ser uno de abundancia de acuerdo a las predicciones típicas del uno de enero que auguraban que gracias a su combinación numérica gozaríamos de una riqueza mayor. 
Parece ser que para la gran mayoría no ha sido así. Por lo que si el plan del año pasado no ha funcionado es preciso hacer uno nuevo. Parece imposible que por una vez nos olvidemos de listas y de propósitos, de planes y fechas. Nos llenamos la boca de uvas cada 31 de Diciembre y rotulamos en ellas un dorado "Carpe Diem" pero según tragamos esas uvas, se nos ahogan las palabras en la garganta. 

Hay momentos en los que nos parece estar viviendo al máximo, disfrutando de cada momento y saboreando las mieles de los placeres más banales a la vez que reconfortantes sin importarnos nada más que el siguiente sorbo de vino. Sabemos que eso es una ilusión, pues es inevitable que las personas hagamos planes de futuro, lo cual hasta cierto punto puede ser necesario y hasta saludable pues nos da una seguridad que nos hace falta para quitar presión a la rutina diaria. pero hasta cuando disfrutamos de esa sensación de libertad espontánea, de esos momentos despreocupados y de los buenos deseos de vivir el presente, eso es otra cuestión. 
Siempre podemos culpar a la complicada sociedad en la que nos vemos inmersos y que, a veces, no llegamos a entender del todo. la necesidad de estudiar o trabajar, adquirir una casa en algún momento y la de tener esa estabilidad familiar que nos presentan e inculcan desde pequeños. 
Las típicas tradiciones y convencionalismos que suelen hacer que olvidemos lo que realmente queremos. 
Pero en Nochevieja, o bien al día siguiente o el siguiente incluso, en algún momento en el que tengamos un poco de lucidez o al menos sobriedad, hacemos una lista mental de lo que realmente queremos o al menos lo que sabemos que debemos hacer. 
Si miramos en cualquier revista femenina hay un "top 5" que año tras año te recomiendan como si fuesen los mandamientos del nuevo año

  1. dejar de fumar y reducir el consumo de alcohol, justa apreciación que a nadie le hace daño
  2. hacer mas deporte o actividades al aire libre, normalmente implicando que perdamos peso
  3. pasar mas tiempo en familia, no trabajando tanto
  4. dedicarse tiempo a una misma, de nuevo no trabajando tanto
  5. gastar menos dinero y ahorrar
Cosas mas o menos difíciles que suelen venir acompañadas por los adecuados productos para conseguiros. Productos como chicles para dejar de fumar; gimnasios de moda y la correspondiente ropita fosforita para asistir a sus clases; tratamientos de belleza que te harán "sentir bien contigo misma", como si por una manicura olvidaras el resto de tus preocupaciones; y una larga lista de cosas que los patrocinadores de las revistas nos recomiendan por un "módico" precio. 

Dejando las revistas y los convencionalismos aparte, los propósitos para un año recién nacido, varían mucho con la edad, podría decir que incluso más en el caso de las mujeres, que tenemos unos años en los que el instinto maternal se va despertando, en algunos casos, pero o cierto es que los deseos de conseguir algún reto no dejan a nadie fuera del juego independientemente de su sexo o condición. Desde el que quiere cambiar de coche este año como si le fuera la vida en ello, hasta la que quiere tener hijos. los propósitos se basan en nuestros deseos mas secretos que con frecuencia no verbalizamos delante de los demás- 
Llegado este punto, me pregunto si no estaremos mascarando nuestros verdaderos deseos diciendo que lo único que nos importa es perder unos cuantos kilos o abandonar los cigarrillos. 
Quizá un deseo latente de tener pareja, o mas vida social, o hijos, o hacernos tratamientos estéticos para mejorar nuestra autoestima sea lo que realmente le pedimos al nuevo año pero no lo reconocemos por vergüenza miedo a lo que los demás puedan pensar. 

Sea como sea, el deseo conlleva un problema y es la decepción. Al no conseguir siempre lo que queremos, sentimos frustración, o o tristeza e incluso culpa si hemos hecho algo que no debíamos. Todo ello nos deja sintiendo una sensación de fracaso que intentamos solventar con un nuevo deseo, otro proyecto en el que embarcarnos. Pero olvidamos que durante ese tiempo que hemos dedicado a un único objetivo, hemos perdido quizá otras oportunidades que han pasado muy cerca de nuestro lado pero ni siquiera hemos percibido. el gran error está en pasarnos la vida haciendo planes sin cesar, sin concedernos un minuto para quedarnos quietos, abrir bien los ojos y respirar. Un minuto para ver lo que ya tenemos y disfrutarlo. un minuto para dejar de querer y desear tener algo mas y admirar todo lo que nos rodea. Pues quizá no tengamos pareja, pero tenemos buenos amigos; tal vez no tenemos nuestra casa soñada, pero tenemos un hogar, puede que no seamos todo lo ricos o esbeltos o atractivos que queríamos llegar a ser pero tenemos aire en los pulmones, comida, salud...cosas tan simples que damos por hecho que siempre olvidamos. 
No se trata de conformarse, se trata de disfrutar. De olvidarse tanto de los planes y los propósitos como de aquella famosa frase "Carpe diem". Pues no es necesario lanzarse a vivir una vida despreocupada en la que sólo nos importe el aquí y el ahora, se trata de dar el justo valor a lo que tenemos cerca, empezando por esas personas especiales que se cruzan en nuestro camino. 
Feliz 2016

jueves, 8 de octubre de 2015

Las cuatro verdades nobles del Budismo

El budismo es una religión minoritaria, oímos decir a aquellos que no nunca han indagado ni en la historia budista ni han dedicado unos minutos a recopilar algo de información.
Contrariamente a lo que se cree, es una religión emergente. Muchos definen el budismo como una práctica vital, un camino, una guía o una conducta incluso, ya que no comparte muchos de los parámetros que tradicionalmente se usan para definir una religión u otra. Es una de las que mas adeptos y seguidores ha reunido en los últimos años, quizá gracias a la contribución de algunos personajes famosos que han declarado públicamente su afinidad por el camino budista.
Sin ser una religión al uso, ya que no esta basada en la adoración de seres invisibles, ni proclama milagros ni tan siquiera impone normas rígidas o sacrificios, el budismo puede ser para el que lo practica una guía vital que forme parte de cada instante de su existencia y le ayude a conseguir la felicidad, la verdadera felicidad
sus enseñanzas, Dharma, son el legado de Sidharta, Buda. Un ser real que existió en su tiempo y descartó otras religiones en busca de un camino diferente.

una de sus principales enseñanzas que se aplican y conservan es la de las cuatro verdades nobles:

"la vida es sufrir", algo que hemos de admitir para evitar una futura decepción

"el sufrimiento viene del deseo", ya que siempre deseamos aquello que no poseemos y aun cuando lo conseguimos, siempre queremos algo mas es posible que suframos una decepción considerable al no ver nuestros objetivos cumplidos.

"el cese del sufrimiento se puede lograr, a través de la vida sencilla, la eliminación de deseos materiales o banales, la meditación y el ejercicio mental el sufrimiento se puede evitar o al menos minimizar.

"la indiferencia te hará dejar de sufrir" si dejamos de tomarnos como algo personal aquello nos sucede no desarrollaremos un sentimiento de culpa que nos lleve a sentirnos mal a nivel personal o incluso a perder la fe en nosotros mismos. A veces las cosas pasan sin motivo o sin porqué pero eso no significa que sea nuestra culpa.

Estas verdades no son fáciles de alcanzar o aplicar a la vida. Estamos centrados en una sociedad de consumo que nos ofrece una infinidad de productos y servicios, a veces innecesarios, para hacer nuestra rutina mas placentera. Una pura búsqueda del placer hedonista que cada vez deja menos espacio para los sentimientos, el esfuerzo, la autentica búsqueda de la felicidad.
Es difícil conseguir ser siempre feliz, pero si ligamos ese estado de felicidad y contento a una persona o a un objeto, en el momento que alguno de ellos desaparezca, se llevara nuestra felicidad consigo.
La lección mas importante que he aprendido de las enseñanzas budistas es que la felicidad ha de venir de uno mismo, no de de seres u objetos externos. Pues es en ese caso cuando llegaremos de verdad a ser felices, no estando supeditados a nada ni a nadie.

"quien es feliz consigo mismo, siempre ser'a feliz y hará felices a los demás" 

miércoles, 23 de septiembre de 2015

Superando la ruptura

que se puede decir de una ruptura que no se haya escrito o publicado en alguna revista femenina, o bien haya sido representado por alguna actriz de Hollywood en uno de sus adictivos seriales. 
Pero a pesar de rozar casi lo manido, las rupturas siguen siendo un tema como se suele decir de rabiosa actualidad (quién diría por primera vez esa frase). Sabemos que de forma instintiva, los seres humanos dedican gran parte de su vida a la búsqueda de compañía, ya sea para pertenecer a un grupo de amigos, a un grupo de trabajo y en especial para formar parte de una pareja. Pero, a diferencia de los pingüinos que dedican casi toda su vida a encontrar su compañero ideal y, una vez encontrado, no se separan de él jamás, los seres humanos no tenemos ni la paciencia, ni el tiempo ni el reloj biológico de estas simpáticas aves. Las personas buscamos la compañía, el amor, la protección de nuestros semejantes por muy independientes que sean. Y es normal, que después de tan ardua tarea, la ilusión y las ganas que ponemos en esa ansiada pareja sean exacerbadas y frecuentemente excesivas. Esa pasión, esa interacción química esa chispa, esa emoción, esas mariposas, todo eso que cuando estás soltera te parecen pasteladas sacadas de una novela rosa barata, pasan a ser las sensaciones diarias que se agarran a tu estómago. 
Algunos expertos sostienen la teoría de que esa euforia está condenada a fenecer pasados 3 años, mientras que otros, más positivos, creen en que la creación de endorfinas a lo largo de nuestra vida nos permiten vivir una bonita historia de amor que no acabe nunca. En este ultimo caso, obviamente hace falta encontrar al pingüino ideal. 
Pero como ya sabemos después de unos cuantos años saltando de una relación a otra, ese santo Grial se va pareciendo más a un vaso de chupito a medida que vamos creciendo. 
una ruptura nunca es fácil, hay quien opina que por ese cocktel de hormonas de la adolescencia es peor una ruptura cuando eres muy joven y que el primer amor nunca se olvida. Otros, piensan que las rupturas en la edad adulta conllevan un mayor duelo pues la relación es más profunda y normalmente acarrea demasiadas cosas en común, ya sean amigos, casas, o incluso hijos. Para mí es mucho peor la segundo, pues es inevitable profundizar a otros niveles en una relación, compartir la vida, a familia, las preocupaciones del trabajo o bien los problemas de dinero. Temas que pueden unirte intiman¡mente a alguien, o por el contrario separarte del todo. 
Después de una relación larga parece casi imposible continuar con la vida tal y como era antes de empezar esa relación, pero es que realmente lo es. Las cosas no serán igual, pero eso no tiene porqué ser malo. La vida te hace cambiar, evolucionar y aprender. Si no, sólo perderíamos el tiempo sin sacar ni tan siquiera una conclusión. 
Los motivos de ruptura se pueden contar por cientos, algunos mucho más serios que otros. Y los consejos para superar dicha ruptura se equiparan en número. Cada uno tiene su propia forma de ver las cosas y de afrontar los problemas, pues esta es la mía:

1 NO ES CULPA TUYA Es fácil que después de mucho tiempo desarrollemos una necesidad de estar disponible para nuestro compañero. Una necesidad aún más acusada en mujeres por el instinto maternal que en general todas tenemos. Igual que queremos protección, nos gusta proteger a nuestra pareja, llegando incuso a ser serviciales si la situación lo requiere. Terminar una relación parece ser como dimitir de un trabajo sin tener otro al que agarrarse, y por algún motivo sentimos que hemos fallado, que no lo hemos dado todo, que es culpa nuestra, más allá de quién sea el culpable de la ruptura. Siempre hay una persona que quiere salir de una relación más que otra, en especial cuando se dan infidelidades, engaños o malos tratos. Pero aún así, terminar la relación no es fácil, por muy claro que le parece al mundo y es ese sentimiento de culpa o de fracaso el que nos lo impide. 
Hay que pensar que si la idea de abandonar a una pareja nos ronda la cabeza, es porque obviamente algo falla. Y quizá no sea culpa de nadie, simplemente no funciona. Eso no es un fracaso, el fracaso sería conformarse y ser simplemente feliz a medias el resto de nuestra vida por no querer admitir que la relación está acabada. 

2 HABLA  es un problema frecuente en la gente el no admitir los problemas e intentar dar una imagen de pareja perfecta por muy podrida que esté a relación. Hablar con las amigas, la familia e incluso buscar ayuda profesional, no es ni mucho menos como para avergonzarse. Quizá en soledad magnificamos los problemas y necesitamos alguien que nos de una perspectiva más clara desde fuera. O bien, aquellos que no consideramos importante y acabamos tolerando a nuestra pareja es algo imperdonable y por no admitirlo ni contarlo acabamos aceptando lo inaceptable. Viendo un telediario siempre oímos desgraciadamente el caso de alguna mujer maltratada que llevaba mucho tiempo sufriendo esta situación, y en los peores casos, ha acabado siendo una víctima mortal a manos de su pareja. Y como mujeres nos preguntamos "porqué aguantar eso" parece imposible estar en una relación así. por desgracia es más habitual de lo que parece, pues no todos los casos acaban en televisión, muchos mueren en el anonimato del dormitorio, pero muchas mujeres acaban por aceptar malos tratos con frecuencia psicológicos y jamás se atreven a decir palabra. O si lo hacen, acaban por justificar cualquier acción de su pareja. " es que había bebido, pero el no es así" "sólo ha sido esa vez" "es un padre estupendo" argumentos escuchados de la boca de mujeres que acaban por aceptar su situación e incluso culparse por ella, por lo que jamás buscan ayuda.Contarlo es el primer paso para superar un problema, y buscar ayuda es esencial. No hace falta hacerlo sola, a veces encuentras más apoyo y compresión del que jamás habias pensado.  

3 PERDONATE además de admitir que no es culpa tuya, o no totalmente al menos aun habiendo sido la causante de la ruptura, es importante evitar pensar en cómo lo pasa la expareja después de una ruptura. Muchas veces, al romper con alguien, vemos que a esa persona le cuesta mucho superarlo. Es habitual que el que más sufre, o quien no quiere aceptar la realidad de esa ruptura intente recuperarte con disculpas, lloros y ruegos.  Aqui hace falta mucha entereza, porque una decisión se toma por unos motivos, pero el amor o el cariño que sintamos nos puede hacer flaquear. Escribe los motivos en un papel, recuerdalos e voz alta, habla con alguien cercano- Hay cosas que son imperdonables, y aunque tu expareja lo pase mal, nadie te puede obligar a querer a alguien, ni aunque sea una persona estupenda. Pero mucho menos se puede flaquear cuando esa persona nos ha herido, nos hacho mucho daño o nos ha engañado. Eso no es amor, eso es obsesión. 

4 CONTROL DE CALIDAD una puesta a punto nunca está de más, manicura, cambio de loook, sesión de compras un nuevo corte de pelo, lo ma´s diferente posible, o bien unos masajes, cualquier mimo que nos queramos dar será más que bien recibido. Es fácil que en una pareja estable te descuides un poco y eso mismo haga que tu autoestima se vea perjudicada. pues qué mejor momento que después de romper para pasar la ITV. Un buen lavado de cara que nos dé confianza y ánimos de salir a la calle a comernos el mundo. 

5 ACTIVATE la actividad social y física son la mejor medicina cuando una relación se acaba. Es posible que nos apetezca volver a ligar y a salir y ponerse en forma después de un periodo sedentario en pareja nos hará sentir muy bien. Verse bien físicamente nos da seguridad, autoestima y por supuesto estando en forma obtendremos salud. Pero el ejercicio va más allá. No hace falta pegarse una paliza en el gimnasio, pero una clase de baile, a zumba, un poco de movimiento nos hace segregar endorfinas que nos hacen mas felices. Una hormona que debería venderse a kilos en el super. Además siempre es una buena opción para conocer gente, socializar en un ambiente relajado y ocupara las horas del día que que ahora están por llenar. 
por otra parte socializar de nuevo, sobre todo después de una relación absorbente se hace cuesta arriba. Ahora la tecnología nos pone al alcance de un click todo tipo de plataformas donde conocer a esa persona especial, ya sea pagando una cuota o de forma gratuita y hasta anónima. pero la desconfianza nos puede hacer pensarlo dos veces antes de caer en redes sociales. Otras alternativas son ma´s amigables, menos sexuales y una buena forma de empezar. Recomiendo mi favorita Meet up. una página donde encontrar gente, amigos, que tienen tus mismos intereses y donde socializar se hace mucho mas fácil. Aquí todo es posible, desde quedadas para ir a bailar, clases de yoga, deportes, intercambios de idiomas, cine, club de lectura, todo tipo de actividades que nos harán olvidar poco a poco el pasado, conocer a gente interesante y crear un grupo de amigos con quien compartir esas actividades que a veces no hacemos por no tener compañía. 


SI DUELE; DUELE. El amor es un arte, igual que dicen que lo es la guerra. En el caso del amor, no tiene porqué haber víctimas mortales pero si muchos corazones rotos. Por ello se dice que el tiempo que viene después de romper una relación se llama duelo. Muchos expertos lo compara con la muerte de un ser querido, algo contra lo que no podemos luchar y que solo el tiempo conseguirá apaciguar. quizá sea una exageración, pero a veces perder a una pareja es casi peor, ya que no tendremos a esa media naranja más a nuestro lado, y debemos aceptar que no se puede hacer nada viviendo a veces con la duda de que quizá no lo dimos todo, o que algo se podría haber hecho para mejorar la relación. Una muerte llega a veces sin esperar y de un modo u otro hay que aceptarla, aunque sea con todo el dolor de nuestro corazón. Y una vez más no importa de quién sea la culpa, es inevitable sufrir. por mucho daño que nos hayan hecho, los sentimientos no se borran de un día para otro. A veces el cuerpo nos pide llorar, o gritar, o cabrearnos de igual modo que nos pide sudar cuando tenemos fiebre, o nos hace vomitar cuando tenemos indigestión. No te niegues a ti misma lo que sientes. Si hay que llorar, llora; si hay que reír, ríe; si hay que gritar, grita. No por suprimir las emociones o negar la realidad vamos a superar una ruptura antes.  El cuerpo y la mente necesitan curarse y parte de ese proceso es ir controlando poco a poco las emociones, pero necesitamos soltar todo lo que llevamos dentro o lo arrastraremos siempre. 

Nadie tiene la fórmula para superar una ruptura, todas son dolorosa y el tiempo va poniendo siempre un poco de luz en cada sombra que veamos en el futuro. Superarla no es fácil pero no es imposible, y nadie sabe lo que la vida nos tiene preparado. Lo que está claro es que quien vive sufriendo, no esta viviendo. Solo está esperando morir. 

sábado, 15 de agosto de 2015

Tiempo y preguntas

Llevo años preguntándome cómo he llegado tan lejos.
Miro atrás en los espejos y veo como los años
se han deslizado entre mis dedos.

Me he mantenido a flote, de pie y  sin aparejos
en pequeños barcos perdidos
a la deriva en un mar de anhelos.

Llevo años ya sintiendo un hormigueo de miedo,
una presión ligera, un continuo desasosiego
pues sufro de lo que llaman un amor muy, muy ciego.

No pensaba en lo que hacía cuando te admití en mi pecho
no me di cuenta mas fui culpable de un complicado cohecho
pues tu no me convenías y eso es más que un hecho

Cuanto tiempo ha pasado,
cuanto nos hemos amado

No recuerdo en qué momento
cambió mi vida de dueño
y solté las riendas de mis sueños

Llevo años aferrada a esos sueños enjutos
que hacen pasar los minutos
entre detalles diminutos

Y aquí me veo otra vez sola
pensando una vez mas, pero en serio lo hago ahora
que ya basta de llorar, que el tiempo todo lo borra

Mas no hay tiempo que consiga todo el dolor borrar
no hay reloj que te permita echar la vista atrás
ni camino que te guíe a donde empezase a andar

Mirando al reciente pasado, que se antoja cada vez mas real,
no consigo ver tu cara, sino otra, que ya nunca volvera.

Dicen que de errores se aprende, pero no estoy muy segura,
dicen que los años consiguen hacerte mas sabio,
a pesar de algunos amores y de todas tus desventuras.

Y no se si solo quiero algo porque no lo puedo obtener
sólo sé que no te quiero como te debería querer
será que siempre queremos lo que no nos dejan tener

Y porqué es capaz un solo hombre de hacerte tan desdichada,
sea por no quererte o por no ofrecerte nada.
pero en su red te va atrapando hasta que estás maniatada

llevo años preguntándome si el tiempo hará el olvido
si a pesar de esos años seguiré soñando contigo
si nunca tendré a alguien con quien ser feliz, como lo fui contigo

Y no se si aprendí algo, en todo este tiempo casi olvidado
solo se que en esta vida hay que vivir el momento y abandonar el pasado

y por eso reflexiono, una vez mas este día
hoy vuelvo a ser la dueña de esta vida casi perdida
que en algún momento del camino, casi dejó de ser mia. 

lunes, 9 de febrero de 2015

Conocer gente y aprender idiomas a la vez


Como profesora de inglés, siempre encuentro el mismo problema en los alumnos. No importa lo mucho que estudien, hagan ejercicios o practiquen sus aptitudes en pruebas orales y escritas, cuando llega el momento de hablar en una conversación real sobre cualquier tema sencillo, les resulta imposible. 
¿A qué se debe? La respuesta difiere según el caso, pero lo más normal es que las personas que intentan aprender inglés no hayan tenido más contacto con el idioma que las clases del colegio. Como ya sabemos esas clases no eran lo que podríamos llamar de gran interés; se limitaban a rellenar los espacios en blanco, a memorizar unos cuantos verbos, a escuchar conversaciones entre adolescentes pidiendo hamburguesas o comprando una entrada de cine. Eran clases mejor o peor llevadas por el profesor de turno que casi nunca incluían conversaciones reales, teatrillos o prácticas. Por tanto, los alumnos de inglés sufren un bloqueo al hablar. Además de la falta de práctica, se suma el miedo a cometer errores, algo normal por otra parte cuando se está aprendiendo ya sea un idioma, un curso o un paso de baile. Pero con el idioma el miedo y la vergüenza e agudizan. 
Pues bien, aprovechando esta pequeña revolución cultural de la que somos testigos en la capital, estas son algunas buenas opciones para mejorar el idioma y apenas sin esfuerzo. 


Una web donde conocer gente de otros países que actualmente residen en Madrid. Haciendo amigos por internet, aunque n sea en persona, se practica la escritura, se dan y reciben consejos, se conocen nuevos sitios gracias a las recomendaciones de los miembros del grupo e incluso se organizan eventos donde conocerse y pasar un buen rato. 
http://www.internations.org/madrid-expats/events

Si lo que buscas es un intercambio de idiomas, un profe particular o anunciar cositas de las que desprenderte esta es tu página 

http://www.lingobongo.com/madrid/en/


Para otras actividades, encuentro y excursiones tanto si vas sólo o con amigos o pareja, aquí nos proponen muchas actividades interesantes: 

http://madridbabel.weebly.com/


Para los más atrevidos que se planteen una aventura en Inglaterra por ejemplo, esta es la página por excelencia para encontrar trabajo, profes, gente, cosas que comprar y por supuesto alojamiento 


http://www.gumtree.com/

Y para prepararse un poquito, os recomiendo estos videos y tutoriales con diferentes profes para todos los niveles. Los videos están muy bien explicados y las lecciones interesantes.




La vida en inglés no es mejor ni peor, pero seguro que es más interesante. 

Que cada segundo que muere en el reloj, viva eternamente en tu corazón






Empezar el día pensando en cada cosa positiva que nos rodea. Simple  facil.

Suena casi a un manido proverbio, eso de que la vida es maravillosa, que hay que disfrutarla y que hay que hacer grandes cosas que nos hagan sentir cada vez más vivos. Pero y qué hay de las pequeñas cosas que a diario nos reconfortan, nos alegran y hacen felices. La simplicidad de una taza de café por la mañana, los cinco minutos remolones en la cama en una mañana muy fría; esos segundos en los que el viento deja de soplar y por un instante dejamos de tener tanto frío; esos minutos de más bajo el agua caliente en la ducha; el primer mordisco a un delicioso  "cupcake" que tan de moda se ha puesto; el momento culminante de nuestra canción favorita que nos impele a agarrar un imaginario micrófono y cantar como si no hubiera un mañana.... Pequeñas cosas que reconfortan, que alegran, que nos dan una silenciosa paz. Sólo apreciamos esos detalles cuando nos faltan, igual que echamos de menos a alguien cuando se marcha, o el pelo rizado cuando cae lacio sobre los hombros, o el verano cuando es invierno o el frío cuando agosto seca las calles. Y porqué no apreciarlo a diario, porqué no pararse un segundo, un diminuto segundo para tomar aire y apreciar cada instante del día. 
Estoy tomando una taza de café, escuchando Edith Piaf en el ordenador y escribiendo algunas palabras. Y ahora no importa el resto del día, no importa el trabajo, no importa nada ni nadie más que yo y mi momento. 
Prueba a encontrar ese momento especial cada día y hazlo tuyo. Saborea ese instante de relax que sin saberlo te da la paz necesaria para enfrentarte a la jornada, a la gente y a la vida. 


"Haz que cada segundo que muere en el reloj viva eternamente en tu corazón"



https://www.youtube.com/watch?v=7I7u_XLtFa0

sábado, 7 de febrero de 2015

ONNA en el café Berlín


EL frío no hace que un buen madrileño se quede en casa un viernes por la noche. Ni el frío ni el cansancio de una agotadora semana ni siquiera  la famosa crisis de la que todos hablamos nos deja sin una noche de diversión. Y es que tras todos esos problemas que arrastramos en la mochila de lunes a viernes han de olvidarse con la llegada de "el finde". Opciones, cientos; decisiones, pocas. Esa suele ser la norma cuando se trata de decidir qué hacer. La ciudad nos ofrece un abanico de posibilidades casi infinitas para disfrutar de algo nuevo cada día que salimos de casa. Aunque siempre acabemos en el bar habitual bebiendo cerveza y comiendo patatas fritas. Por ello cuando alguien te propone un buen plan, organizado y que no requiere ninguna preparación e lógico lanzarse a él sin pensarlo. 
Lugar: café de Berlín
Evento: concierto ONNA
Una de esas noches que empiezan con no más que un ligero entusiasmo y con ganas de poco más que de meterse en cualquier lugar calentito que resguarde del inesperado frió que asola la ciudad. 
Una de esas noches cualquiera que acaba reconciliándote con la gente, por ser simplemente bonita. 
De la mano de un nuevo grupo que gracias a sus esfuerzo y dedicación se abre paso en el panorama musical disfrutamos en EL Café Berlín de una sesión de buena música en un ambiente bohemio y hasta decadente que nos transportó a uno de esos cafés encantadores de París donde sólo la gente "guay" se reúne para escuchar música y hablar de los grandes problemas del mundo. Un pequeño paréntesis en el caótico ritmo urbano. Un precio muy razonable por una buena sesión de música en directo en un ambiente familiar, con algunas caras habituales en estos eventos que descansaban sus copas sobre pequeñas mesas de madera y rasgadas butacas de terciopelo rojo. 
Y es que a pesar de mis habituales quejas Madrid a veces te sorprende con un lugar especial que simplemente te hace disfrutar, que te permite evadirte  deja que la música te atrape. 

Sin problemas, sin pensar, sin organizar... una noche espontánea. Y ya sabemos que las noches espontáneas siempre son las mejores. 


"se feliz, nadie lo será por ti"