jueves, 8 de octubre de 2015

Las cuatro verdades nobles del Budismo

El budismo es una religión minoritaria, oímos decir a aquellos que no nunca han indagado ni en la historia budista ni han dedicado unos minutos a recopilar algo de información.
Contrariamente a lo que se cree, es una religión emergente. Muchos definen el budismo como una práctica vital, un camino, una guía o una conducta incluso, ya que no comparte muchos de los parámetros que tradicionalmente se usan para definir una religión u otra. Es una de las que mas adeptos y seguidores ha reunido en los últimos años, quizá gracias a la contribución de algunos personajes famosos que han declarado públicamente su afinidad por el camino budista.
Sin ser una religión al uso, ya que no esta basada en la adoración de seres invisibles, ni proclama milagros ni tan siquiera impone normas rígidas o sacrificios, el budismo puede ser para el que lo practica una guía vital que forme parte de cada instante de su existencia y le ayude a conseguir la felicidad, la verdadera felicidad
sus enseñanzas, Dharma, son el legado de Sidharta, Buda. Un ser real que existió en su tiempo y descartó otras religiones en busca de un camino diferente.

una de sus principales enseñanzas que se aplican y conservan es la de las cuatro verdades nobles:

"la vida es sufrir", algo que hemos de admitir para evitar una futura decepción

"el sufrimiento viene del deseo", ya que siempre deseamos aquello que no poseemos y aun cuando lo conseguimos, siempre queremos algo mas es posible que suframos una decepción considerable al no ver nuestros objetivos cumplidos.

"el cese del sufrimiento se puede lograr, a través de la vida sencilla, la eliminación de deseos materiales o banales, la meditación y el ejercicio mental el sufrimiento se puede evitar o al menos minimizar.

"la indiferencia te hará dejar de sufrir" si dejamos de tomarnos como algo personal aquello nos sucede no desarrollaremos un sentimiento de culpa que nos lleve a sentirnos mal a nivel personal o incluso a perder la fe en nosotros mismos. A veces las cosas pasan sin motivo o sin porqué pero eso no significa que sea nuestra culpa.

Estas verdades no son fáciles de alcanzar o aplicar a la vida. Estamos centrados en una sociedad de consumo que nos ofrece una infinidad de productos y servicios, a veces innecesarios, para hacer nuestra rutina mas placentera. Una pura búsqueda del placer hedonista que cada vez deja menos espacio para los sentimientos, el esfuerzo, la autentica búsqueda de la felicidad.
Es difícil conseguir ser siempre feliz, pero si ligamos ese estado de felicidad y contento a una persona o a un objeto, en el momento que alguno de ellos desaparezca, se llevara nuestra felicidad consigo.
La lección mas importante que he aprendido de las enseñanzas budistas es que la felicidad ha de venir de uno mismo, no de de seres u objetos externos. Pues es en ese caso cuando llegaremos de verdad a ser felices, no estando supeditados a nada ni a nadie.

"quien es feliz consigo mismo, siempre ser'a feliz y hará felices a los demás"