lunes, 14 de octubre de 2013

Las malvas de tu piel   (Juliett París)

Fue una mujer hermosa
Que el tiempo cubrió de lilas
Que frías manos robaron el rosa
Que antaño brillaba en sus mejillas

Una mujer entregada al amor
Quedó relegada a la oscuridad
Que ya solo siente dolor
Que sus días se hacen eternidad

Una mujer que vive ahogada
Tropezando con muros de añoranza
Que sus lágrimas enjugan
Con pañuelos de esperanza

Ella pisa sobre cristal fino
Y de violeta pinta su alma
De carmín pinta su destino
Y miedo le roba la calma

Esposa de alianza de sangre
De nupcias fatales
De promesas cobardes
Y arrepentimientos banales

Madre de hijos del silencio
Aguardando en las  esquinas
Encogidos por el miedo
Escondidos tras las cortinas

Victima del olvido
De socorros sufragados
De pañuelos de rizo
De vendas de cardos

No calles ahora, mujer
No vuelvas la vista,  para huir
Abre los ojos, para ver

Pide ayuda, vuelve a vivir